Todos debemos tener cuidado a la hora de exponernos a los rayos de sol, aplicar la protección solar adecuada para nuestra piel y evitar las horas centrales del día, sobre todo ahora con la llegada del verano, cuando nuestro planeta y el sol se encuentran a una menor distancia y los rayos inciden con mayor fuerza. Algo que se acentúa en aquellas personas que padecen la conocida como alergia al sol, aunque su nombre correcto es fotodermatosis.
Señales de la piel que podrían indicar que sufrimos alergia al sol o fotodermatosis
Antes de nada, aclarar que la llamada alergia al sol se refiere a diferentes afecciones que aparecen en la piel a modo de respuesta debido a una hipersensibilidad de nuestro sistema inmunitario. Es decir, no es que el sol provoque la alergia, pero sí causa las diferentes reacciones cutáneas posibles. Una patología que sufren algunos famosos, como Malú, que ha hablado en más de una ocasión sin tapujos de su alergia al sol, de cuántos picores le provocan las ronchas y de cómo se cuida de evitar a los rayos.
Si tras un tiempo al sol notas alguno de estos síntomas, presta atención:
Eritema.
Picor.
Ronchas.
Náuseas, dolor de cabeza o dificultad respiratoria. Estas también son comunes en golpes de calor o insolaciones.
Síntomas de la alergia al sol
Aunque depende del tipo de fotodermatosis, estas son las reacciones más habituales:
Erupción polimorfa solar. Afecta más a mujeres que a hombres de tez clara y, aunque pican mucho, no dejan marcas en la piel. Se localiza, normalmente, en la cara, el escote, los antebrazos y la zona anterior de las piernas
Prurigo actínico: Suele aparecer entre los cinco y los diez años, sobre todo en niñas. Se trata de erupciones con costras y eccemas.
Dermatitis crónica y dermatitis atópica. Puede agravarse durante los meses de verano por los baños en piscinas y el mar, por irritación por el cloro y la sal. Se recomienda una ducha siempre al salir del agua.
Fotosensibilización por sustancias químicas. Destaca por quemaduras similares a las causadas por una exposición prolongada al sol pero desproporcionadamente graves para cortos tiempos al sol.
¿Cómo prevenir la alergia al sol?
Lo más importante es cuidar nuestra piel siempre que vayamos a estar al aire libre, no únicamente en los ratos de sol y playa. Es decir, que debemos aplicar protección solar cuando vayamos a una terraza, a hacer deporte al aire libre o a pasear en un día soleado. Recuerda además no exponerte al sol cuando estés con cualquier tipo de tratamiento antibiótico.
