Ajena a cualquier connotación negativa sobre el trabajo de los psicológicos, la colaboradora de El Hormiguero reconoce abiertamente acudir frecuentemente en una práctica que le llena de beneficios a nivel mental: «Soy muy fan, todos tenemos dudas porque vivir es complicado», confesaba.
En esa entrevista admite haber acabado «fenomenal» y agradece haber descubierto facetas sobre sí misma que, de otra manera, jamás hubiese comprendido o conocido.
Además, le sirve como escudo frente a un habitual problema: Que se te suba la fama a la cabeza. «Yo no creo sufrirlo, y si lo hiciera supongo que mis amigos y mi familia me lo dirían», comenta sobre este asunto, añadiendo con humildad que todo lo que ella ha conseguido siempre estará «por debajo del ejemplo» de su madre o de su hermano Enrique.
Hace unos meses, los medios volvían a hablar de Tamara Falcó por su nueva pareja, viendo a ambos de forma cariñosa en diferentes cenas y reuniones con amigos. Se trataba de Íñigo Onieva, amigo desde hacía años de la diseñadora de moda y al que los medios no tardaron en situar dentro del foco mediático.
Para una persona ajena a las cámaras, podría haber sido un cambio difícil; en cambio, Tamara Falcó se muestra sorprendida por lo bien que lo ha llevado: «Este acoso dura un tiempo y se lo ha tomado fenomenal, porque no es fácil», reconocía en Vanity Fair.
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