El diario 20minutos.es ha publicado una interesante recomendación de Jose Luis Jiménez, uno de los mayores expertos del mundo de la transmisión por aerosoles. Jiménez advierte de donde está el peligro cuando entras en un comercio o lugar público y observas que la persona que hay dentro se pone la mascarilla solamente cuando accede la clientela.
Según este científico es un hábito muy común que tanto en establecimientos abiertos al público o en transporte público como taxis, Uber, Cabify, etc… la persona encargada de atender al cliente lleve la mascarilla bajada si se encuentra solo y reaccione colocándosela perfectamente cuando alguien irrumpe en el automóvil o local.
Esta práctica aumenta de forma importante el riesgo de contagio de coronavirus y el investigador explica el porqué.
El virus permanece en el aire suspendido por aerosoles «una hora o dos» en los espacios cerrados.
Por eso, si una persona se encuentra en el interior de un lugar sin mascarilla está expulsando el virus de forma constante… y de nada sirve que cuando otra irrumpa tenga el impulso de subirse la mascarilla. Imagínate si es dentro de un vehículo, cuyo espacio es aún más reducido.
«Si esta persona está infectada«, explica Jiménez, «está echando virus al aire y solo deja de echarlos o echa menos cuando tú entras, pero ese aire está lleno de virus y si tu tapabocas no es muy bueno pues entonces te puedes infectar», ha advertido.
El consejo del experto no deja lugar a dudas: si vamos a entrar en un local que está cerrado y vemos que la persona que está dentro tiene la mascarilla quitada, debemos evitar entrar… es un riesgo hacerlo.
Las partículas contagiosas tienen un tamaño de 0,08 micrometros y el espacio de las mascarillas de tela es hasta mil veces más grande.
El profesor Simon Kolstoe, de la Universidad de Portsmouth, compartía en un artículo para Science Alert un truco mediante el cual puedes comprobar la efectividad de una mascarilla casera.
Este recomienda acudir a alguien que utilice cigarrillos electrónicos y que, con la mascarilla puesta, trate de echar el humo. Es una forma de visualizar la trayectoria del aire que expulsamos al respirar. La mascarilla es efectiva si la gran parte del humo toma una trayectoria contraria y si, de atravesarla, no lo hace con gran distancia.
Si no conoces a nadie que vapee, no te preocupes, Kolstoe mencionó también otro truco para comprobar la efectividad de la mascarilla. Consiste en colocar una vela a una distancia no muy lejana y, con la mascarilla puesta, tratar de apagarla.
Este método nos permite volver a comprobar la dirección del aire al respirar, solo que sin verlo directamente como con el método del vapeo.
No obstante, la vela nos hará saber si la mascarilla que hemos fabricado es efectiva y nos protege frente al virus. Si somos capaces de apagarla, quizá es porque la mascarilla deja traspasar demasiado el aire al expulsarlo.
MÁS SOBRE:
© Sociedad Española de Radio Difusión, S.L.U.
© Sociedad Española de Radiodifusión realiza una reserva expresa de las reproducciones y usos de las obras y otras prestaciones accesibles desde este sitio web a medios de lectura mecánica u otros medios que resulten adecuados a tal fin de conformidad con el artículo 67.3 del Real Decreto-ley 24/2021, de 2 de noviembre.