Rocío Carrasco y su nuevo recado a Antonio David: «Yo sí he procurado que tuvieran la figura de su padre intacta»

Rodrigo Díaz

El último episodio de Rocío Carrasco dejaba una curiosa lección que le regalaba la hija de Rocío Jurado a su exmarido sobre la forma de comportarse con sus hijos.

Una manera de actuar que contrasta enormemente con la de Antonio David, según el relato de Rocíito. Durante los anteriores episodios, hemos visto todo tipo de detalles y gestos del excolaborador de Sálvame para que Rocío y Antonio Flores acabasen odiando a su madre.

Actos que a ella jamás se le hubiesen ocurrido imitar: «Yo he procurado no hablar para que mis hijos crecieran con la figura de su padre intacta«, expresaba en este nuevo capítulo de «Rocío, contar la verdad para seguir viva».

Reconoce haber esperado hasta que Rocío Flores tuviera 24 años y Antonio 22 y lamenta que, hasta entonces, todos hubiesen creído ciegamente la versión de su exmarido. Lamenta no haber recibido la ayuda de la justicia ni de los medios que en ningún momento procuraron «juzgar» a Antonio David.

 

«Yo no he abandonado a nadie»

 

Esa imagen de «mala madre» parece estar quedándose atrás al conocer la versión de Rocío Carrasco. Se defendía en la serie documental frente a todas las acusaciones de «abandono» de sus hijos, poniendo todo tipo de ejemplos en los que estuvo muy pendientes de ellos.

La mejor muestra de ello la daba en su primera visita al psicosocial. Le exigían un papel como reconocimiento de todas las dolencias que padecía su pequeño, aunque a ella no le hacía falta: «Le enumeré uno por uno todos los problemas de Antonio», confesaba.

Un conocimiento que no fue suficiente para el juez, quien se vio más convencido por el hecho de ver a Rocío Flores ya con su padre. Rocíito explicaba cómo se quedó con su padre para no separar a los dos hermanos.