Tu perro puede tener torsión gástrica o torsión de estómago y tú no lo sabes. Survet lo ha definido como una patología por la que el canino sufre una distensión anormal del estómago por acumulación de alimentos, líquidos o gases. Su estómago se dilata y esto hace que se compriman los órganos torácicos y abdominales.
Todo esto acaba afectando también al bienestar general del animal ya que afecta al funcionamiento de los órganos afectados y a los de alrededor. Incluso cabe la posibilidad de que entre en shock si no le llega bien la circulación.
Se puede descubrir tras la manifestación de algunos de estos síntomas:
El estado del animal puede variar en función de la gravedad de su situación. Hay unas horas de margen ya que si empeora puede llegar a perder el conocimiento. La torsión avanza de forma rápida e incluso puede desencadenar en la muerte.
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No se ha dado con la causa de esta patología, pero sí que hay algunos factores de riesgo. Estos son algunos de ellos:
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