Quién no ha ido paseando por la calle y de repente ha oído el aullido de un perro. A veces es normal, pero en ocasiones las causas de este sonido no son buenas. Puede significar muchas cosas, desde la comunicación con otro animal hasta la sensación de peligro. Según informa El Español, el 89% de los españoles que tienen mascota tienen un perro como animal de compañía. Pero de esa cifra, hay un porcentaje que cree que los aullidos perjudican la convivencia.
Lo primero de todo, tienes que intentar entender por qué emite este sonido. Desde aquí vamos a contarte algunos de los motivos frecuentes que suelen justificar este comportamiento. Muchas veces el motivo es que quieren que les hagas caso. Es su manera de llamar la atención, si de otra forma no lo consigue, empezarán a aullar. También pueden estar diciéndote que están asustados, tristes o ansiosos.
Es muy común que los perros sientan una gran unión con sus dueños. Por eso, si estás separado de tu mascota por mucho tiempo, reflejará su inseguridad aullando.
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El canino se comunica con otros perros a través de ladridos, pero también de aullidos. Otra de las opciones es que le duela algo y no sepa cómo expresarlo. Si se ha dado un golpe con algo es probable que aúlle porque sabe que de esa forma más a ver qué es lo que pasa. Aunque en estos casos hay que tener cuidado y si es por un golpe, lo mejor es acudir al veterinario.
Es difícil saber exactamente cuál es el motivo por el que lo está haciendo, pero en principio no tendrías que preocuparte. Sin embargo, si los aullidos son constantes y no das con el por qué, lo mejor es que llevas a tu mascota a un especialista.
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