Ambos acaban de convertirse en papás del pequeño Miguel, quien es la mayor expresión de su amor. Más que el matrimonio, por lo que Paula Echevarría no está convencida de volver a pasar.
Calleja aprovechó la confianza que la pareja depositó en él para ahondar en temas más delicados y que Paula Echevarría ha tratado de mantener al margen de lo público en los últimos años: su divorcio con el artista David Bustamante.
«Yo me casé para toda la vida«, confesaba la actriz cuando era preguntada por su ruptura con el padre de su hija Daniella. Ambos formaron una de las parejas más destacadas de inicios de siglo y el anuncio de su divorcio fue muy sonado. Y aunque han demostrado tener una buena relación por lo que les une, su hija, la pareja sigue copando titulares de forma conjunta.
«Al final siempre que sientes que fracasas en algo son cosas delicadas«, expresaba cuando era preguntada por si la separación fue traumática. Quizá no traumática, pero lo que sí está claro es que a Paula Echevarría el fin de su matrimonio le marcó tanto que cuando rompió con Bustamante cerró las puertas al amor.
Tanto es así que la actriz pidió al arquitecto que solo quería un lavabo. «No quería a nadie más. Pero ahora tengo dos. Las mejores cosas aparecen cuando no las buscas«, añadía esta.
Paula Echevarría está en su mejor momento con su chico. Ambos se acaban de convertir en papás de forma conjunta y viven un momento muy dulce en su relación. El matrimonio, sin embargo, no es para ellos un plan ni a corto ni a largo plazo.
«No nos planteamos casarnos. Le damos la importancia justa al matrimonio«, revelaba la actriz, para la que es mucho más importante «una buena convivencia» para garantizar una relación duradera.
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