El pasaporte COVID supone una herramienta fundamental para que los ciudadanos europeos podamos movernos con cierta libertad. En estas fechas, en las que la variante omicrón del coronavirus acecha al viejo continente, conviene revisar algunos datos relativos a este documento imprescindible.
Lo más importante es que, como otros muchos certificados, el pasaporte COVID tiene fecha de caducidad, que se ha establecido actualmente en nueve meses desde la fecha de inoculación de la última dosis.
El pasado 16 de diciembre, las autoridades involucradas tomaron la decisión de que no aplicará el concepto de «pauta completa» o «vacunación completa». A estas alturas ha quedado claro que será necesario recibir una dosis de recuerdo para proteger a la población de la nuevas variantes del virus que vayan apareciendo.
Desde la Comisión Europea se da a los estados miembros un límite de 90 días para que los ciudadanos reciban esta nueva dosis de recuerdo. De lo contrario, el pasaporte no sería válido y no permitiría la movilidad.
Sin embargo, con esta nueva dosis será suficiente. Por el momento no se ha establecido cómo necesaria una nueva renovación, aunque deberemos tomar estas medidas con cierta cautela. Las condiciones de la pandemia pueden ir cambiando a lo largo de su evolución en el tiempo.
En definitiva, nuestro pasaporte covid tendrá vigencia siempre que hayamos recibido el pinchazo de recuerdo en un plazo máximo de tres meses tras recibir la última dosis
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