Paolo es incombustible…, y es que la fuerza del amor lo puede todo. «Yo soy Paolo, el brasileño, cariño mío», intentaba comentar con una víctima al azar que terminaba colgando rápidamente.
Isidro, como es habitual, lía a sus víctimas al teléfono. En este caso prueba suerte con Zaragoza, llamando a un taller mecánico con la esperanza de que conozcan a su novio, Alberto. «Yo no te conozco», le respondían al otro lado del teléfono.
Paolo explica el profundo amor que siente por su novio y le pregunta al mecánico que está al otro lado del teléfono, si conoce le conoce. «¿Tu novio no se llama Carlos?», le pregunta al atrevido. «No, no… Zaragoza es muy grande. Yo estoy casado, con hijos y tal», respondía el mecánico.
«Me ha dicho Alberto que cuando venga a Zaragoza voy a sentir lo que es un cachirulo en condiciones», explicaba Paolo. «¿Tu sabes lo que es el cachirulo?», le preguntaba a su víctima, que sorprendido terminaba riendo.
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