Su precio, muy económico, tan solo un euro y las comercializa bajo el sello de El bosque verde.
Pero si quieres encontrar una solución aún más económica al problema, te vamos a echar una mano.
Al respirar con la mascarilla, el aire que soltamos se eleva y queda condensado en los cristales de las lentes.
Lo más importante es poner las gafas encima de la mascarilla pero si, a pesar de ello, tus gafas siguen empañándose ¡toma buena nota!
1º Aplicar jabón en las lentes, mucho mejor si es en pastilla. La razón es sencilla: el jabón evita la formación del vaho, ya que es un agente humectante, de modo que favorece la circulación del agua y no se condensa.
Deberás aplicarlo en la parte interna de ambos cristales de las gafas. Frota suavemente con los dedos y seca las lentes con una gamuza apta para gafas.
2ºCalienta las lentes con el aliento antes de ponértelas. De esta forma, tu aliento subirá la temperatura de la lente y se empañará menos.
3ºFrota los cristales con una patata. Contiene almidón, que ayuda a evitar que se formen gotas. Aplica en la parte interior y retira con papel de periódico.
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