Acostumbrados a las valoraciones de Jordi Cruz, Pepe Rodríguez y Samantha Vallejo-Nágera que determinan los concursantes que pasan a la prueba de eliminación, hemos visto algo muy llamativo en este último reto por equipos al ser los propios concursantes quienes asumían esa responsabilidad.
Fran dejando a Ofelia en el suelo #MasterChef pic.twitter.com/w86BCAMpIL
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200 programas después hemos visto este hecho inédito en el que los participantes probaban los platos de sus compañeros y decidían cuáles de todos eran los mejores y cuál el peor.
De esta manera, Arnau y Amelicious se llevaban el elogio de compañeros y del propio jurado, quienes coincidían en este aspecto. No así en la parte negativa, llevándose José María el primer delantal negro de la noche pese a que los reputados cocineros eligieran las elaboraciones de Fran y Toni como las peores.
La prueba de eliminación tuvo como ingrediente principal a la mantequilla, basándose en hasta tres elaboraciones que permitirían a los participantes salvarse poco a poco hasta que la batalla por permanecer en los fogones fuese un uno contra uno.
De esta manera se enfrentaban Álex y María, apodada «La Barbie de Tomelloso». Su duelo no estuvo a la altura, según interpretaron los tres miembros del jurado. Finalmente fue el primero, con un resultado «imposible de comer», quien se despedía finalmente de MasterChef.
El tercer expulsado de #MasterChef 9 es @AlexMChef9. ¡Gracias por formar parte de esta gran aventura aspirante! https://t.co/5KB3O2GWnE pic.twitter.com/hF984QKDY5
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Esta supone la tercera vez (de tres programas) que María se enfrenta a la prueba de eliminación, resultando triunfadora en todas ellas: «Me voy abrasada, me voy con quemaduras pero no me voy de MasterChef», celebraba la participante mientras subía las escaleras y se reunía con el resto de sus compañeros.
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