En La isla de las tentacionestodo puede pasar, de un día para otro todo cambia y las parejas terminan de romper lo poco que los unía. En el último programa tres de los concursantes han caído de lleno en la tentación.
Marina, Lola y Manuel se han llevado a la cama a sus solteros favoritos para disfrutar de una noche de pasión y desenfreno, pero ha habido casos en los que no se han cumplido las normas.
Manuel ha estado con Fiama mucho tiempo y se veía la tensión existente entre los dos. Al final, la noche hizo que los dos se dejasen llevar y acabasen en la habitación. Sin embargo, a diferencia de las otras parejas, ellos se escondieron en el baño. Esto es una falta muy grave y saltarse las normas del programa ha traído consecuencias. Manuel en la siguiente hoguera no ha podido ver las imágenes de Lucía, sino que sus compañeros las han visto por él para contarle qué ha pasado. Al contrario que el caso de su novia que sí ha podido ver todo lo que Manuel ha hecho.
Su reacción no ha sido agradable, de hecho, ha tenido que abandonar la hoguera por la situación. En el adelanto podemos ver que su paciencia ha llegado al límite: tenemos nueva hoguera de confrontación.
Lola llegó de la hoguera de confrontación con Diego enamorada, después de prometerle que se quedaba en la isla para demostrarle que podía confiar en ella. Horas después estaba abrazada a Carlos. La noche siguiente también se apoderó de su cabeza y acabó en la cama con el soltero. Escondiéndose bajo las sábanas, Diego pudo ver todo lo que su novia había hecho: “ha llegado a un punto extremo”
Marina e Isaac también llevan desde el principio del programa tonteando. A pesar de que la concursante dijo que no quería cruzar esa línea en el programa, la pasión se ha apoderado de la pareja y se han acostado en Villa Montaña. Jesús esperaba que este momento llegaría, simplemente ha sentido decepción al ver como una relación se va al traste por un momento de placer.
