Una atrevida nos traslada su preocupación a través del correo atrevete@cadenadial.com para recibir el siempre útil consejo de Susana Espelleta, ¡escucha!
Lola tiene ya 35 años y reconoce que «desaparece» de sus recientes citas a la cuarta o quinta ocasión. Lo atribuye a un agobio que choca, por otro lado, con las ganas de tener pareja estable: «Me da miedo envejecer sola», nos confesaba.
Nuestra compañera parece haber dado en el clavo, bien con ese «corazón cerrado» o un capítulo del pasado que le impide avanzar. Considera que está tratando de llenar sus «vacíos» sin éxito, todo por culpa de no «soltar el pasado«.
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«Pon la edad en un segundo plano«, le insistía Susana en una consulta que seguro le vendrá bien para cambiar. De hecho, la especialista sentencia con una clave para sus próximas citas: «Esfuérzate para ir más allá, suelta el pasado y abre a amar», le pedía.
