Menudo nombre el que han puesto a la borrasca que en los próximos días azotará a la Península Ibérica en este comienzo de año que llega potente en cuanto al tiempo se refiere: Filomena.
Las zonas más afectadas serán el centro y norte peninsular con nieves probables en cotas bajas de tan solo 300 metros de altura.
En Madrid, desde la gran nevada de enero de 2009 no vivíamos una tormenta de nieve con tanta fuerza como ésta.
A la bajada del mercurio se unen importantes nevadas de hasta 10 centímetros de espesor, fuertes rachas de viento y en las zonas donde la nieve no hará presencia, lluvias persistentes: Canarias, Cádiz y Málaga.
Se espera que la borrasca, situada al norte de Canarias, siga afectando a la mayor parte del país con nubosidad abundante, precipitaciones y viento.
Para los próximos días, incluido el fin de semana, la Unidad de Emergencias y Gestión de Crisis ya desplegado todos los medios e infraestructuras que tiene disponibles para hacer frente a los efectos que pueda causar la borrasca Filomena.
Así en la carreteras, el Ministerio de Transportes ha preparado más de 1.239 equipos quitanieves.
Adif ha intensificado la circulación de trenes a fin de no dar tiempo a la acumulación de nieve o hielo.
Y con respecto a los aeropuertos, en el plan puesto en marcha por Aena se contempla priorizar algunas pistas para tratar de mantenerlas siempre operativas. Es el caso del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, que según la Agencia de Meteorología, será uno de los más afectados por el temporal.
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