Cuando en el año 2005 se aprobó la Ley Antitabaco España se colocó como pionera en la regulación de la venta, el suministro, el consumo y la publicidad del tabaco. Otros países europeos no tardaron en seguir nuestros pasos y con medidas más radicales y efectivas para eliminar el hábito de fumar.
Cinco años más tarde la ley en nuestro país sufrió una revisión y actualización con medidas como las que prohibían fumar en espacios cerrados como restaurantes, bares o discotecas. Más de 10 años después la lucha contra el tabaquismo continúa y el siguiente objetivo es el de prohibir fumar también en algunos espacios al aire libre, como son las terrazas, la playa o las paradas de autobús.
Cada año el tabaco mata a millones de personas en todo el mundo y es la causa principal de numerosas y graves enfermedades como el cáncer de pulmón o enfermedades coronarias. Lo llamativo de esto es que muchas de estas víctimas no son fumadores directos, sino pasivos. Esto, entre otras muchas cosas, impulsa la lucha contra el tabaquismo, que está pasando factura a la salud de la población.
Según la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), «hay predisposición del Ministerio, pensamos que quiere dar un paso firme en este sentido«. Unas declaraciones que ha recogido el Sindicato Asambleario de Sanidad de Madrid en su web.
SEPAR considera que la prohibición de fumar en terrazas será una realidad muy pronto. Aunque las medidas se han centrado en la hostelería, se planea ampliar a otros terrenos de ocio como los estadios deportivos, las playas o las paradas de autobús.
«Creemos que puede ser más extensivo porque el humo ambiental de tabaco perjudica y enferma a los que están alrededor, no solo molesta«, expresaba Andrés Zamorano, presidente del CNPT. A día de hoy existen prohibiciones de fumar en ciertos clubes o espacios, pero «son acciones individuales, lo interesante es que esté regulado por ley nacional«.
En esta lucha contra el tabaco ha jugado ha jugado un papel importante el último año la pandemia de la Covid-19. Con la intención de frenar la propagación del virus a través de los aerosoles se llevaron a cabo restricciones que prohibían fumar en lugares como las terrazas de los bares.
Sanidad podría aprovechar este hecho para mantenerlo a largo plazo en una lucha contra el tabaco que se planea desarrollar en un plan integral que se pondría en marcha hasta 2025.
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