Muchos de nosotros hemos crecido comiendo petit suisse ¡aún salivas cuando recuerdas su cremosidad y dulce sabor de este postre!
Pues bien, si quieres compartir con tus hijos la dulce experiencia, te proponemos un plan
¡Elabora con su ayuda una riquísima tarta de petit suisse que servirá de último plato para coronar una bonita sobremesa de Navidad!
Es muy sencillo, por eso, te invitamos a que entréis en la cocina, os pongáis un delantal y ¡manos a la obra! Un bonito tiempo en familia que degustaréis horas después chupándoos los dedos.
200 ml. de nata para montar
100 g. de galletas (normales, tipo Maria)
100 ml de leche
6 petit suisse de fresa (da igual la marca)
2 cucharadas de mantequilla
1 sobre de gelatina de fresa
1ºTenemos que hacer una base de galleta. Muy sencillo, trituramos la galleta y la mezclamos con mantequilla hasta lograr una masa consistente.
2ºColocamos la cama de galleta al fondo del molde procurando que quede bien compacta. Reserva en la nevera hasta que tengas la crema lista.
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3ºBate los 6 petit suisse con la nata.
4ºCalienta 50ml de leche, agrega la gelatina y mezcla.
5ºIncorpora los otros 50ml de leche y disuelve bien. Ahora mezcla todo con la nata y el petit suisse que habías reservado.
6ºUna vez que hayas logrado una crema homogénea, vierte todo sobre la base de galleta y enfría en el frigorífico al menos durante 6 horas. Si la dejas para el día siguiente, todavía mejor.
7ºPuedes decorarla con unas fresas, frambuesas o moras para que te quede de cine… a los más pequeños les encantará hacerlo
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