La pasta es un plato sencillo de cocinar y además ofrece muchas opciones distintas a la hora de prepararla. Pero cuando la cocinamos normalmente solemos hacer para un regimiento ya que a la mayoría nos resulta complicado acertar con las raciones. Si cuando haces pasta para comer terminas haciendo comida para un regimiento, esto te interesa.
Hay algunos trucos que nos permiten no pasarnos de la cuenta, por ejemplo debemos hacer la medida en seco, no vale echar los macarrones y echar un puñadito más pensando que nos hemos quedado cortos, ya que este es uno de los fallos principales y más si luego vamos a añadir carne, verduras o salsas que harán que al final te sobre comida.
La mano es una medida menos exacta, si llenas tus manos cómo si fuesen un cuenco estarás echando una ración más o menos. Al ser menos exacto es mucho más fácil que te pases.
Si en lugar de macarrones queremos medir espaguetis la cosa cambia, en este caso el plato, el vaso y el puño no nos servirán y la mejor forma de medirlos será uniendo el pulgar con el índice como si lo fueses a poner sobre el ojo. El círculo que queda es la proporción ideal para cocinar una ración.
A la hora de medir también debes pensar en lo «comilones» que sois, no es lo mismo una ración para alguien que come poco que para alguien que come mucho y además ten en cuenta lo que vayas a añadir a la pasta, ya que eso aumentará su volumen.
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