La presentadora se quedó sin trabajo, algo a lo que se sumaron problemas fiscales por culpa de un asesor «que fue un desastre» y una «ruptura sentimental muy gorda«. Se le juntaron muchas cosas que terminaron desembocando en un pozo. No obstante, hoy con la lección aprendida asegura que «es necesario tocar fondo, no pasa nada. Está bien porque después del fondo no hay nada, solo nos queda resurgir y hacerlo con más brío«.
La situación le sobrepasó. «Yo estaba con una depresión como un caballo en mi casa«, confiesa en una charla con Vodafone España que ha compartido en sus redes sociales. «Me quedé sin un duro, sin un euro«, añadía Toñi Moreno. Pero en esa desesperación acudió a pedir ayuda a una escuela de coach, donde en un acto de caridad (pues no tenía dinero) le regalaron el curso.
Gracias al apoyo de su entorno consiguió salir de ese pozo oscuro, aunque el cambio se produjo cuando se dio cuenta de que solo ella tiene el mando de su vida. «El crack en mi cabeza fue cuando dejé de culpar las circunstancias del exterior y empecé a ver que la solución estaba en mí«, confesaba.
De igual manera, reconoce que es muy importante tener siempre una motivación. La suya ahora es su hija Lola, la alegría de su vida que la convirtió en mamá con 46 años. Eso, sumado a una vida profesional plena (presenta Un año de tu vida en Canal Sur) hacen que esta sienta que ahora puede con todo.
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