Almudena Grandes falleció el pasado sábado a consecuencia de un cáncer que le habían diagnosticado un año antes.
Hoy Tereixa Constela en una columna de El País, desde donde se asomaba cada quincena a reflexionar junto a sus lectores, define a la perfección a la Almudena escritora: «Grandes tenía la curiosidad de la historiadora y la potencia de la novelista. Ambas cualidades le permitían construir unos artefactos redondos, donde el rigor científico y la documentación estaban al servicio de una trama pensada para emocionar y remover. La literatura nació para eso, para vivir otras vidas y llorar otras penas».
Amigos personales como Benjamin Prado hablan en su despedida de la mujer: «A mis sesenta años, solo he conocido otra persona en toda mi vida tan generosa como ella, tan dispuesta a estar siempre ahí para lo que necesitaras, a echarte un cable o dejarte muy claro que las puertas de su casa siempre están abiertas para ti, que si tienes una urgencia a cualquier hora del día o de la noche es su número el que hay que marcar: su marido, Luis García Montero. Puede que Dios los criara y puede que fuese otra cosa, pero ellos se juntaron para dar lugar a una pareja memorable, en el terreno literario y en todos los demás. Cómo se han querido y se han cuidado; cómo nos han querido y cuidado a los demás».
La música también despide a Almudena Grandes
Malena es un nombre de tango es una novela de Almudena Grandes que publicada en Tusquets en el año 1994… y no, no habla de música si no de cómo una niña de 12 años lucha contra las normas impuestas por su familia para desenmarañar el laberinto de secretos que ésta guarda.
Esa niña bien podía ser Almudena Grandes de la que se han despedido músicos como Marwan, Alejandro Sanz o Rozalén.
Marwan compartía con sus seguidores estas bonitas palabras hacia ella:
«Es imposible recibir una noticia más triste. Que nos haya dejado Almudena Grandes, una de las más importantes escritoras de nuestro país y un referente absoluto para muchos de nosotros, es una pena enorme. Con ella se va una de las voces más comprometidas de nuestro país, una mujer con una sensibilidad, un talento y un carisma enormes. Sus columnas, cada semana, eran un faro para muchos de nosotros, que en ocasiones necesitábamos leerla para saber lo que pensábamos sobre un tema. Ella siempre nos mostraba la realidad con agudeza, inteligencia y sensibilidad. Ojalá la despidamos como se merece, como una de las más grandes de la cultura española.
Querida Almudena…Tuve la suerte de compartir algunos momentos bonitos contigo. Gracias por la complicidad y el cariño siempre, por escuchar con tanto amor mis canciones. Te vamos a echar tanto de menos…
Quiero mandar todo mi amor y el abrazo más grande a mi querido Luis García Montero y a toda su familia en estos momentos tan tristes. DEP.»
También Alejandro Sanz o Rozalén. El primero haciendo referencia a la enorme trascendencia que de la escritora y una de sus novelas, El Corazón helado y la segunda llorando su gran pérdida.
También Andrés Suárez se sumaba al lamento
