kiko matamoros

Kiko Matamoros, visiblemente emocionado al recordar a sus padres

Noelia Bertol

La tarde del jueves Kiko Matamoros iniciaba Sálvame desde un lugar diferente, en los pasillos de Mediaset coronados por fotos de su hija Ana, con la que no tiene relación desde hace meses. El colaborador reconocía estar casi seguro de que aquello no le gustaría mucho a su hija y dio cuenta de lo afectado que está por el distanciamiento con esta.

Aunque lo que verdaderamente le emocionó fue el viaje en el tiempo que hizo al ver esas imágenes. «Me recuerda mucho a mi padre, es idéntica a él. La gente se confunde y dice que se parece a Makoke, pero es igual que mi padre«, confesaba este con una sonrisa en la cara. Al momento este se sinceraba y decía que recordar a su padre le había «producido un golpe de nostalgia«.

Kiko Maramoros


¿Hay posibilidades de reconciliación?

 

Al ser preguntado por Carlota Corredera sobre la posibilidad de que se reconcilien, este expresaba con sinceridad: «Si soy honesto de verdad, esperanzas no tengo muchas«. Eso sí, confesaba que la situación le daba «más pena por ella que por mí«.

«Creo que hay que atravesar la vida con determinadas ausencias y si son ausencias que podías haber evitado pues todavía peor. Yo echo muchísimo de menos a mi madre y para mí sería un drama haber estado años pudiendo tener comunicación con ella y no haberla tenido. El tiempo es irrecuperable«, se lamentaba este haciendo una lectura del paso del tiempo y de un hecho del que su hija se podría arrepentir con los años.

Kiko, emocionado al hablar de su madre

 

Esto le hizo recordar a su madre, la cual sufrió demencia y «una metástasis que fue lo que acabó con su vida«. El colaborador de Sálvame recuerda una anécdota que vivió con ella al nacer su hija Ana. Este se la llevó para que la conociera y su madre le preguntó que de dónde la había sacado. Matamoros le hizo creer que la había encontrado en la calle y la veterana se alarmó.

«Estuvimos pasando la mañana, ya me iba a ir y me dice: ‘oye, hijo, te voy a decir una cosa. Quédatela porque he visto que la quieres mucho y que la vas a cuidar muy bien«, expresaba este visiblemente emocionado, tanto que ni sus gafas de sol pudieron evitar que esa emoción traspasara la pantalla.

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