Jorge Fernández marca abdominales en Instagram ¡la tableta de la suerte!

Nuria Serena

Jorge Fernández es como el buen vino, mejora con los años. Una vez diagnosticada la enfermedad que le hizo perder peso de manera estrepitosa hace años, el presentador no deja de sorprender con su físico en redes, donde comparte imágenes que dejan patente la gran forma física en la que se encuentra.

Su última fotografía se ha hecho viral y ha provocado que Twitter se haya llenado de memes: «Pensando en los paneles de la ruleta», «Pensando en los paneles de ‘la ruleta de las hostias» han sido algunos de los comentarios que se han compartido ante la contemplación de semejante torso.

 

Jorge Fernández y la enfermedad de Lyme

 

El conductor de La Ruleta de la Suerte suele postear en sus perfiles oficiales de redes, la evolución de su trastorno digestivo, la enfermedad de Lyme: alimentación, ejercicios, tips…

Precisamente, la que nos ocupa hace referencia a la diferencia entre probióticos y los prebióticos. Pecho al descubierto y lectura, La era de los impresionistas. han dejado con la boca abierta a más de uno: 16.000 likes y subiendo.

 

 

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Este es el mensaje que Jorge ha dejado en Instagram:

«ROBIÓTICOS Y PREBIÓTICOS

Es importante diferenciar ambos porque existe mucha confusión. Se han puesto de moda, se recomiendan mucho pero hay que saber qué son y para qué sirven.

Los PROBIÓTICOS son bacterias o microorganismos que influyen positivamente en nuestra salud, que se encuentran encerrados en una cápsula o en otra forma para ser suministrados.

Son millones de cultivos vivos de bacterias de diferentes cepas.

Generalmente las sustancias activas de estos probióticos son BIFIDOBACTERIUM y LACTOBACILLUS.

Los PREBIÓTICOS serían el alimento para nuestras bacterias probióticas. Gracias a este “alimento” las bacterias podrán sobrevivir y multiplicarse. Evitando una proliferación de bacterias malas qué darían lugar a un SIBO ( sobre crecimiento bacteriano) o una DISBIOSIS ( desequilibrio entre bacterias buenas y malas).

Sería lógico pensar que la mejor manera para optimizar resultados fuera combinar PROBIÓTICOS con PREBIÓTICOS, es decir, un SIMBIÓTICO.

Siempre hemos asociado los probióticos con su toma posterior a los antibióticos.
Pero no tiene porque ser así.

En momentos de estrés, fatiga, consumo excesivo de alcohol, dieta desequilibrada, sistema inmunológico debilitado, infecciones, anticonceptivos, alergias, etc…podrían ser de gran ayuda ya que ahora se sabe el vínculo tan estrecho que hay entre microbiota y este tipo de desajustes.

Siempre recetados por un especialistas

Si queréis saber más sobre este tipo de temas, os recomiendo la cuenta de @doctoradelapuerta«