Isidro Montalvo anda cabreado desde hace un tiempo por culpa del cuñado de la atrevida, que no vale directamente para albañil, ¡el problema es que lo paga quien no debe!
Una tarima flotante y una obra regular son las responsables de esta discusión entre nuestro compañero y Angelines… ¿O era Mari Carmen? ¿No era Marisa? Un lío de nombres que va a conseguir desquiciar a la pobre mujer que nada tenía que ver.
Ya era bastante indicativo que él se llamase El Tenajas, quisiese mandarle a la obra «al de las mosquiteras» y se creyese que el lugar donde debían ir fuera la Calle El Codo. No culpamos en absoluto a la atrevida que colgó al escuchar esto…
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Sin embargo, esto no ha sentado nada bien a Isidro Montalvo, quien volvía a llamar para ajustar cuentas: «Es una vergüenza lo de los clientes hoy en día. Ya no responden como antes», le reprochaba a la mujer, poco antes de cargar contra su «cuadrilla de operarios».