«Vamos a llamar a la primera oyente que va a recibir este regalo«, comenzaba antes de marcar. «Si, ¿quién es?», contestaba la víctima intrigada.
Jonatan continua con sus intenciones: «te llamamos de la radio porque hay una persona que ha escrito una poesía para ti», comentaba. «No me lo esperaba», respondía nuestra atrevida, sin sospechar nada.
«¿Quién crees que puede ser?», decía Jonatan, manejando la situación. «Soy Jonatan, te esta escuchan España entera… Soy uno de los locutores más guapos, sobre todo con mi voz», presumía el «modesto» DJ.
«Una curiosa ranita, iba por las vías del tren. Patinaba con sus patitas, con glamuroso vaivén», declamaba el locutor disfrutando de su propia voz mientras la víctima permanecía atónita. De pronto, el DJ comienza a tener algunos problemas con su voz y sus palabras se vuelven incomprensibles. La mujer, impasible, aguanta el tipo.
Con santa paciencia, nuestra atrevida anónima sostiene el momento sin percatarse de la broma. «¿Quién ha sido la persona que me ha dedicado la poesía?», preguntaba la interlocutora del DJ. «En el tarjetero pone «anónimo». Nos ha dejado el ticket del taxi que le ha traído a la emisora, pero no podemos saber quién es», concluía.
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