Pero muchas veces llegamos a la hora de la cena tan cansadas que lo que menos nos apetece es ponernos a cocinar.
Te damos algunas ideas de cenas sencillas de elaborar y muy saludables que te permitirán comer bien y tener más tiempo libre.
Se cocinan en poco tiempo y quedan muy jugosas y además no se mancha nada con lo cual no dejarás la cocina empantanada. Puedes dejar que se marinen (esto es lo que más tarda), mientras haces otras cosas y luego en menos de quince minutos estarán listas.
Necesitas tres pechugas de pollo, hierbas frescas, dos limones, 100 ml de aceite de oliva virgen extra, 100 ml de vino blanco, sal y pimienta negra.
Salpimienta las pechugas y mételas en una bolsa grande de congelar con el aceite y el vino blanco, además de las hierbas y los limones en rodajas. Cierra la bolsa, saca el aire y masajea para que todos los ingredientes se distribuyan bien por el pollo.
Déjalas entre dos y cuatro horas en la nevera. Pon aceite a a calentar en la sartén y dora el pollo durante siete minutos, añade la marinada y cuece otros siete minutos. Te quedarán la mar de jugosas.
Puedes hacer el mismo plato con sepia o chipirones.
Necesitas dos cogollos de lechuga, 50 g de queso azul, 400 g de salmón fresco, 1 cucharada de salsa de soja, pimienta negra molida al gusto, picatostes, 2 cucharadas de mayonesa y 3 cucharadas de nata líquida.
Barniza el salmón en un poco de salsa de soja, ponlo en un estuche de vapor y cocínalo en el microondas seis minutos hasta que esté jugoso. Espolvorea con pimienta negra y deja enfriar.Aparte mezcla la mayonesa, la nata y el queso azul.
Corta la mitad del lomo del salmón en trocitos, corta los cogollos en cuartos y ponlos sobre una fuente, Entre los cogollos, ponemos los trozos de salmón y los aliñamos con la salsa de queso, añadimos unos picatostes.
Saltea unos espárragos dos o tres minutos a fuego fuerte y reserva. En la misma sartén, saltea unas gambas un par de minutos.
Luego bate los huevos y échalos también a la sartén removiendo, apaga el fuego y añade los espárragos, mezcla y a cenar. ¡Cena lista!
Más sencillo imposible, saltea los guisantes de bote o congelados con unas habas y unos taquitos de jamón.