El problema no está en que tu perro llore, la preocupación llega cuando tu animal de compañía llora mucho. Estas son las causas más comunes para justificar el llanto de tu canino, sobre todo si se trata de un cachorro ya que suelen ser más sensibles.
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Una de las razones principales por las que tu perro llora a menudo es cuando te vas de casa. Esto se denomina ansiedad por separación. El animal está acostumbrado a estar contigo y siente peligro, estrés o frustración cuando te vas, por eso llora. La solución para esto es educarle correctamente para que aprenda y entienda que esta situación puede darse cada día.
Al igual que los bebés lloran cuando tienen hambre o sueño, los perros también lo hacen cuando quieren algo. Es su manera de expresar que tienen necesidad de algo, o incluso que solo quieren llamar la atención, pero ¡cuidado! No es una buena forma de que aprenda a pedir las cosas, si le haces caso va a identificar que si llora va a conseguir lo que quiere. Esta acción hay que intentar corregírsela desde que son cachorros. Como decíamos antes, ¡son iguales que los humanos!