El interiorista Lorenzo Meazza ha analizado los seis errores de decoración más frecuentes que cometemos los españoles en nuestras casas.
El responsable de interiorismo de Ikea España afirma que «No existe una regla de oro para decorar bien una casa», pero su conclusión tras observar varios hogares españoles es que los españoles compartimos seis manías en lo que a decoración se refiere.
Te contamos cuales son nuestras manías decorativas, la primera tiene que ver por el gusto por los objetos de la abuela, Nos gustan los muebles de la abuela. «En España, como en Italia, tenemos una tradición muy fuerte de la artesanía», dice Meazza.
«Asociamos muchas veces la calidad o las cosas buenas a determinada forma de hacerlas. Los muebles tienen que pesar, deben ser grandes, oscuros, de madera buena. Y no necesariamente tiene que ser así.», aclara.
Otra de las cosas que tenemos en común es según el decorador que no damos importancia a la iluminación probablemente porque tenemos mucha luz, solemos iluminar los espacios con un pequeño plafón y generalmente con luz fría.
Además solemos tener nuestro salón cómo un museo lleno de objetos que representen nuestro estatus, afirma el interiorista para el que «Es mejor una casa para vivir, más que para enseñar. Mucha gente tiene un sofá bueno, donde al final no se puede hacer nada para que no se estropee. Ha de ser una casa mucho más flexible, abierta a los niños…»
Nuestra casa es igual durante todo el año, para Meazza, tal y cómo recoge el periódico El Páis » Lo natural es que cambie con nosotros. En el norte de Europa, los cambios del clima influyen mucho en la decoración de la casa. Se transforma en Navidad y en primavera… Se pueden cambiar manteles, cortinas, complementos… Nosotros aquí lo hacemos mucho menos. Compramos el mantel para 15 años. Pero podemos tener un mantel más para primavera… Darle ese cariño».
Según explica Lorenzo Meazza, en el Sur de Europa estamos acostumbrados a tener a alguien que nos haga todo en casa, si queremos pintar llamamos al pintor, si queremos arreglar un mueble al carpintero. Sin embargo en los países nórdicos son mucho más manitas y eso te conecta con tu hogar de manera distinta y te hace sentir incluso más orgulloso de haberlo hecho tú mismo.
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