Shakira: «Mi pelo es la mayor fuente de sufrimiento de mi vida»

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El próximo mes de febrero se cumplen dos años de la famosa actuación en el intermedio de la Super Bowl que protagonizaron mano a mano Shakira y Jennifer López. Dos de las artistas latinas más aclamadas a nivel internacional ofrecieron un espectáculo a la altura en lo que fue uno de los últimos eventos multitudinarios antes de la pandemia del coronavirus.

Todo salió a la perfección a ojos del mundo y la actuación es una de las más aclamadas de la historia de la competición deportiva. No obstante, nadie imaginó que horas antes de la gran noche Shakira vivió uno de los mayores dramas de su vida con su pelo.

El drama de Shakira antes de la Super Bowl

En una entrevista con Glamour, revista de la que es portada este mes la de Barranquilla, esta confesaba que la noche antes de la actuación de la Super Bowl esta se tiñó el pelo como de costumbre, con el tinte que usa habitualmente, con tan mala fortuna que el pelo se volvió negro. Así lo contaba la artista: 

«¡Mi pelo es la mayor fuente de sufrimiento de mi vida! No puedo ni empezar a decirte las cosas que solo me pasan a mí y a mi cabello (…) Me estaba tiñendo el cabello la noche antes del evento, con el mismo tinte que uso todo el tiempo ¡y esa noche mi cabello decidió volverse negro!»

Para colmo, ese día era su cumpleaños y todo parecía fundirse a negro (literalmente). «Era casi medianoche y por supuesto al día siguiente tenía que estar lista, perfecta, fresca, y dormir bien y todo eso«, agregaba la artista. Este tipo de dramas siempre ocurren antes de grandes momentos y afortunadamente lo pudieron arreglar a tiempo.

Solucionado en tiempo récord

Shakira estuvo perfecta y reluciente en la noche de la Super Bowl. ¿Cómo lo arreglaron a tiempo? «Lo tuvimos que teñir otra vez, usando agua de peróxido. Mi cuero cabelludo se irritó muchísimo. Muchas cosas pasaron después…«, recuerda la de Loba.

La melena de la artista es una de las más características del mundo de la música y esta confiesa que tiene una relación de amor-odio con ella, pues aunque siempre la tiene «al borde del asiento«, también «sobrevive a muchas cosas, es muy resiliente«. ¡Como la propia Shakira!