También influye el estilo de vida que llevemos y la falta de sueño, según el doctor Alberto Morano, vicepresidente segundo de la Sociedad Española de Medicina Estética (SEME). «Una ojera con presencia de aumento de bolsa palpebral (de la ojera propiamente dicho); la ojera hundida; la ojera vascular o azulada; la ojera pigmentada o marrón. Cada una de ellas tiene sus propias causas y sus tratamientos diferenciados», afirma.
Te dejamos algunos trucos que te ayudarán a eliminarlas. Adopta estas costumbres para que las ojeras que ya tienen, al menos, se vean reducidas y poco a poco puedan desaparecer.
Como una de las principales causas de su aparición es el sueño, deberás empezar a dormir más, como mínimo, 8 horas diarias. De esta manera vas a notar que tienes más energía, y sobre todo, lo notarás en tu rostro.
La alimentación también puede influir en su aparición, evita las grasas saturadas y cambia de hábitos para intentar mitigar la aparición de las ojeras.
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Estos surcos bajo el ojo lo fomentan la acumulación de líquidos, formándose bolsa. Si elevas tu cuerpo al dormir, seguro que prevendrás su aparición.
También pueden aparecer cuando tus vasos sanguíneos se dilatan, por lo que aplicar gasas frías en la zona puede ayudar a bajar la inflamación. De esta manera, se reduce la congestión y te hidratarán, mejorando el problema.
Sin duda, la sobreexposición al sol puede ser un problema, pues ayuda a que aparezcan ojeras más intensas. Utiliza siempre protector solar. Otro remedio casero que recomiendan muchos dermatólogos es la de preparar dos bolsas de té, dejarlas enfriar y colocarlas cinco minutos sobre los ojos. Los resultados serán impresionantes si se hace de manera diaria.
Si estas son muy pronunciadas, un contorno de ojos es lo que necesitarías. Para que sean efectivos deben contener aloe vera, vitamina K o cafeína. De esta manera, lucirás una mirada mucho más fresca y joven.