Por eso, son muchos los ciudadanos que llevan meses sin aparecer por sus segundas residencias: en otras provincias, cerca de la playa, la montaña, la casa de los abuelos en el pueblo.
En 2020 casi nadie pudo disfrutar de sus segundas residencias, ya que el Estado de Alarma decretado por el Gobierno restringió los desplazamientos desde el 14 de marzo hasta el 21 de junio. Y en otoño volvió a ocurrir lo mismo ante la llegada de la tercera ola.
La declaración de la renta obliga a tributar
Los contribuyentes estamos obligados a declarar las propiedades inmobiliarias no alquiladas -salvo la vivienda habitual y como máximo dos plazas de garaje adquiridas conjuntamente con la vivienda habitual-. Son rentas inmobiliarias imputadas que debemos declarar en el IRPF: la cantidad a pagar se calcula aplicando al valor catastral del inmueble un porcentaje del 1,1% o del 2%, dependiendo de la última revisión realizada por el catastro.
El resultado de esa operación lleva a muchos propietarios de segundas viviendas a incluir en la declaración de la renta rendimientos extras -que oscilan entre los 300, 500, 1.000 euros o más- y ha pagar por ello dependiendo del resto de ingresos obtenidos y circunstancias personales concretas.
Foto: Onarc
Lo que pide la OCU
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha presentado una petición ante la Agencia Tributaria y ante el Consejo para la defensa del contribuyente para solicitar que en 2020. a la vista de las restricciones por el Estado de Alarma, la segunda vivienda compute solo por el tiempo disfrutado.
«Desde la declaración del estado de alarma y posteriormente con las restricciones que han venido adoptando las diferentes comunidades autónomas, esas segundas residencias no han estado a disposición de los propietarios», argumenta el organismo
Una petición que no comparte en absoluto la dirección general de tributos que considera que la imputación de rentas inmobiliarias no tiene en cuenta la utilización efectiva de la segunda vivienda, sino su disponibilidad a favor de su titular, sin atender a circunstancias que puedan afectar a dicha utilización».
