El corrector sirve para cubrir cicatrices y marcas de granitos, sin necesidad de comprar otro producto para este fin.
Si quieres un resultado natural escoge uno cuánto más líquido mejor.
Lo mismo ocurre con las rojeces e incluso con las manchas algo más oscura, te ayudará a disimularlas.
El corrector también puede servirte de prebase de sombras de ojos
El corrector también puede hacer la función de prebase de sombras de ojos, sobre todo si no te gusta llevar el neceser muy cargado.
Bastará con que te apliques una fina capa por la zona del parpado y luego difumines, eso si siempre con la brocha o el pincel del propio corrector, con la mano engrasarás más el párpado.
Si te has olvidado de tu base de maquillaje o se te ha terminado tranquila tu corrector puede sustituirla perfectamente, si lo mezclas con crema hidaratante conseguirás un acabado de bb cream.
Si no has tenido tiempo de arreglarte las cejas tranquila, el corrector también puede disimular esos pelitos que no te ha dado tiempo a quitarte.
Puedes corregir con un pequeño pincel para perfilar labios si te has salido al maquillarte.
“Si aplicando tu labial, te has salido un poco del contorno de los labios, puedes utilizar el corrector para corregirlo sin necesidad de desmaquillarte», explica Gato
Si el iluminador te parece demasiado llamativo, con un corrector puedes conseguir un resultado parecido pero más sutil. Tienes que usar un tono más claro que el de tu piel y aplicarlo en la zona de los huesos de las cejas, pómulos y en el centro de la nariz.
La cobertura no soluciona cualquier problema, tal y cómo explica la maquilladora Cristina Lobato al mismo medio, “El principal error es pensar que a mayor cobertura, más se va a cubrir la imperfección. Querer corregir con un producto absolutamente todo es un error muy común y no es así. Generalmente vamos a conseguir cubrir con el color y no con la cobertura»
Si la ojera es imperceptible, simplemente con iluminar la zona con un tono beige natural o la propia base se va a cubrir. «Cuando está más pronunciada, neutralizamos la zona con un tono salmón. Una vez neutralizada con un tono anaranjado pasamos a neutralizar el tono anaranjado con el tono beige: o con base o con un corrector
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