Pre-champú, mascarilla, acondicionador, champú, sérum, protector solar, tratamiento anticaída, fijador… ¿Realmente es necesario realizar semejante ritual para conseguir la melena de nuestros sueños? Afortunadamente, puedes conseguir resultados magníficos sin necesidad de tanta parafernalia.
Hay tres puntos básicos que debes tener en cuenta si quieres lucir una buena melena:
Deberías cortarte el pelo al menos una vez cada 3 meses para prevenir la aparición de las temidas “puntas abiertas”. Es más rápido que utilizar un producto específico y, de paso, puedes aprovechar para hacerte un estilismo más favorecedor (como estos cortes de pelo para mujeres canosas, si es tu caso).
En cuestión de químicos capilares, está claro que menos es más. Apuesta siempre por productos que no contengan siliconas ni parabenos, en pro de los realizados con ingredientes naturales.
La formulación de los productos que utilizas en tu cabello incide directamente sobre su aspecto, así que dedica unos minutos a leer sus envases antes de comprarlos. De hecho, quizás te interese saber cómo crear tu propia mascarilla capilar casera.
“En el término medio está la virtud”, ergo, lo mejor que puedes hacer para cuidar tu cabello es utilizar agua tibia. Si está demasiado caliente, tu pelo se llenará enseguida de grasa. Si está demasiado fría, no lograrás disolver la suciedad acumulada.
Cepíllate el pelo no solo antes y después de acostarte, sino también antes de lavarlo. Utiliza para ello un cepillo o peine de púas anchas que esté bien limpio. Con este sencillo gesto aportarás brillo a tu melena y reducirás la rotura (ya que el cabello seco es más fuerte que el húmedo).
Las altas temperaturas no le hacen favor a tu melena. Si no te da la vida para aplicarte un protector térmico, lo mejor es que reduzcas el uso del secador y de las planchas. En su lugar, envuelve tu cabello con una toalla a modo de turbante para que esta absorba la humedad del pelo sin necesidad de frotarlo. También puedes protegerlo del sol directo con la ayuda de un pañuelo o sombrero.
Llevar una dieta sana y equilibrada es fundamental para lucir pelazo. Beber suficiente agua, así como comer fruta, verduras, pescado, lácteos y frutos secos te ayudará a mejorar sensiblemente la calidad de tu cabello. En particular, está demostrado que tomar vitaminas con bambú ayuda a reducir su caída.
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