No hace falta ducharse en un baño público para poder coger hongos. De hecho, es bastante frecuente cogerlos. El principal factor que les hace aparecer es la humedad. Es por eso por lo que estamos acostumbrados a verlos o tenerlos en verano.
Es imprescindible secarse muy bien los pies después de la playa o la piscina. Además, se deben usar chanclas siempre que estemos en zonas comunitarias. Si eres una persona que suda mucho busca un tratamiento para controlarlo y así evitar que tus pies tengan humedad constantemente. Asimismo, hay que tener en cuenta que debemos desinfectar las tijeras o el cortaúñas si notamos que una uña no está como siempre ya que los hongos pueden transmitirse rápidamente de un lado a otro.
Algo que es importante evitar es pintarse las uñas si notas que tienes hongos, puedes verlo por el color de la uña. De hecho, algunas personas no se han quitado bien el esmalte de una vez a otra y eso ha podido ocasionar que se acumule infección haciendo que su uña cambie de color y tenga el mismo aspecto que si tuviese hongos. Aunque pensemos que solo afectan a las uñas, esta bacteria puede influir en nuestra salud.
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