Lo importante es escoger bien cual tomas, no todos los panes son iguales, su composición de hecho es la que determina sus nutrientes y su capacidad para hacerte adelgazar o engordar, Si practicas una dieta sana y haces algo de ejercicio, puedes comer pan tranquilamente, pero eso si, elígelo siempre integral o de masa fermentada.
El integral se hace con el grano entero, es decir su harina no está refinada y por eso contiene salvado que lo hace rico en fibra y en cuanto al pan de masa madre, está hecho con un fermento hecho con harina y agua, rico en ácido láctico y en nutrientes cómo Vitaminas E y C y betacaroteno. Por eso son los dos tipos más sanos de pan y los que debes tomar si quieres controlar tu peso.
Si consumes habitualmente pan integral tostado o de masa madre evitarás picar entre horas ya que estarás más saciado y conseguirás así eliminar los aperitivos no saludables.
El índice glucémico del pan integral es moderado, en el rango de 56 a 59, mantiene los niveles de azúcar más estables después de las comidas, previene la diabetes y esencial dentro de una dieta equilibrada.
Normalmente cuando nos ponemos a dieta tenemos ansiedad y deseamos comer carbohidratos para hacer que el cerebro segregue serotonina. Por eso tomar pan integral o de masa madre evitará esa ansiedad que genera eliminar de nuestra dieta un alimento que nos gusta. Además el pan integral te proporcionará la fibra necesaria para tu organismo, esto es según la Asociación Estadounidense del Corazón, entre 25 a 30 gramos de fibra al día.
En definitiva, los hidratos de carbono son esenciales para que nuestro cuerpo funcione ya que nos proporcionan la energía suficiente para ello. Incluso hay un reciente estudio que califica las dietas muy bajas en carbohidratos como dañinas a largo plazo.