Te damos las claves para perderlos de manera sencilla y sin que te suponga un tremendo esfuerzo.
Con estos sencillos gestos recuperarás tu peso inicial y además desintoxicarás tu organismo.
Tu cuerpo necesita volver a su rutina de horarios, así que el primer paso será regular tus horarios de comida y si puedes de sueño, ya que dormir poco aumenta la sensación de hambre.
Desayuna bien, toma una fruta a media mañana y cena pronto.
Sentarte a comer y masticar despacio los alimentos hará que tengas mejores digestiones.
Para evitar atracones es muy importante no pasar hambre, no estés más de cuatro horas sin comer, come siempre alimentos que sean sanos y te sacien cómo frutos secos, fruta, yogur desnatado o fiambre y evita los azúcares de digestión rápida, esto es los bollos industriales, las chuches y los dulces en general.
Si comes más veces y menos cantidad evitarás que tu hígado trabaje en exceso.
Beber agua es fundamental para evitar la retención de líquidos y reducir volumen. Tomar frutas y verduras, sopas, infusiones y caldos naturales, ayudará a tus riñones a eliminar toxinas.
Además el poder depurativo de las infusiones te ayudará a limpiar tu organismo y perder volumen y peso. El té verde es una de ellas, además del diente de león, la cola de caballo, el hinojo y el boldo.
Son perfectas para tomar entre horas, puedes endulzarlas con miel o sirope.
Si te apuntas a la moda de la leche, quesos y yogures desnatados perderás peso.
Los lácteos enteros aportan demasiadas calorías y grasas y si cambias a los desnatados o de soja o avena notarás que bajas de peso.
Son muy importantes para depurarse y no añadir calorías extra a tu alimentación, los alimentos detox por excelencia son las frutas y verduras por su alto contenido en agua y vitaminas y sus escasas calorías. Piña, melón, papaya, pomelo, alcachofa, endivias, apio, lechuga, hinojo, espárragos, son perfectos para limpiarte.
En cuanto a tus menús deben incluir caldos y cremas de verduras desgrasados, frutas y verduras frescas, cereales integrales, más pescado y menos carne.
Intenta cocinar los alimentos hervidos, a la plancha o en el horno y evita rebozados y fritos.
Si quieres bajar de peso sin hacer dieta no tomes azúcar blanco, sólo aporta calorías. Intenta sustituirla por sacarina o productos naturales cómo la fructosa, la panela, el sirope de arce o la miel.
Mira las etiquetas de los alimentos, ya que muchos llevan azúcar encubierta, cómo el pan de molde, los embutidos o los zumos envasados entre otros.