La docuserie: Rocío, contar la verdad para seguir viva le ha dado mucho trabajo. Y es que la periodista se ha entregado al completo en este proyecto ya que le afectaba también de manera personal.
Después de dejarse la piel en algo viene la mejor parte, las vacaciones. Más que merecidas, la periodista ha puesto rumbo a la playa para poder desconectar y recargar pilas.
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La periodista ha podido disfrutar ya de estos días de desconexión. Libertad para el cuerpo y la mente sin que nadie moleste. Brisa, mar, sol, planes… todo perfecto para poder olvidar la dura y larga temporada de trabajo.
Estar siempre al pie de cañón tiene un gran coste emocional, pero ella ha sabido estar en cada una de las situaciones. En sus vacaciones no ha estado sola pues su marido y su hija han ido con ella para disfrutar en familia de grandes momentos. A pesar de que la intención era desconectar del trabajo, David Valldeperas, compañero de Sálvame, se ha ido con ellos.
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