El ayuno se ha puesto de moda. En mayor o menor medida, podemos decir que el aspecto de nuestra piel es el reflejo de nuestra salud interior, por ello se considera que una persona que cuida su piel, se hace tratamientos y la mantiene en perfecto estado, resulta ser una persona saludable.
Pero… ¿y qué te parecería que te dijera que en muy poco tiempo podrías ver tu piel más resplandeciente, con mayor elasticidad y tersura?
Técnicamente, el cuerpo entra en «estadode ayuno» ocho horas después de la última comida que es cuando el aparato digestivo termina de absorber los nutrientes de los alimentos.
Entonces el cuerpo recurre a la glucosa almacenada en el hígado y en los músculos para proporcionar energía.
Así funciona el ayuno
El ayuno está considerado una manera efectiva y saludable de mejorar el aspecto de nuestra piel.
Existen estudios científicos que demuestran que el ayuno favorece a la regeneración celular, así como también ayuda a paliar los signos y síntomas de enfermedades en la piel.
Durante el proceso del ayuno y tras la aplicación de esta en nuestra dieta se produce un cambio metabólico que lleva a nuestro cuerpo a una reducción en la producción de radicales libres o estrés oxidativo, con lo que evitamos en gran parte ocasionar daño en los tejidos y órganos, por otra parte también se activa los mecanismo celulares de reparación, por ello la piel en su proceso muestra una mejora visual.
La piel, que es el órgano más grande y extenso de nuestro cuerpo y es objeto de múltiples afecciones, de las cuales podríamos nombrar como ejemplo la mala nutrición.
Si bien es cierto y todos sabemos que el tabaco, el sol y la polución pueden dar efectos negativos en la piel, como el envejecimiento, el déficit de algunos nutrientes también tiene que ver en ello, por ese motivo, es importante que para obtener un buen resultado con el ayuno, debe hacerse a través de un profesional.
Ojo: El ayuno no debe convertirse en un tratamiento fijo para la piel, es necesario el uso de otros factores de mejora como la constante hidratación, el consumo de agua en su debida medida, el aporte de vitaminas e incluso una dieta adecuada para este objetivo.
Importante: Antes de empezar con una etapa de ayuno debemos consultar SÍ o SÍ con un dermatólogo y un nutricionista para asegurarnos de que nuestras condiciones de salud son buenas para llevarlo a cabo.
