El picoteo de estas navidades seguras es algo que no se puede pasar por alto. Si todavía tienes dudas sobre el menú, vamos a ayudarte con los aperitivos, de los que seguro que no sobra nada.
Te dejamos algunas sencillas elaboraciones sencillas más allá de las típicas de los clásicos canapés de queso con salmón y los míticos huevos rellenos.
Las piruletas de parmesano son perfectas para acompañar en nuestra bienvenida. Con un molde y un palo de piruleta, un poco de queso parmesano rallado y calentarlo en el horno conseguirás que se solidifique. Además, puedes añadirle orégano o albahaca molida, además de tomate en polvo. Déjalo enfriar y, ¡listo para servir!
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Apostar por el hummus de remolacha es una alternativa al clásico de garbanzos. La chef Ada Parellada del restaurante Semproniana recomienda que «en su defecto, siempre podemos cocer la remolacha y preparar unas tostaditas a modo de aperitivo, además de utilizar el agua de cocción, que es rosa, para múltiples recetas».
Abusar de las carnes y pescados es uno de los principales problemas de la Navidad. Por ello, brindar unas brochetas de verduras en las comidas resultará satisfactorio para todos y para nuestras básculas una vez que llegue enero. «al servirnos verde en el plato, tomaremos menos cantidad de otros alimentos más calóricos sin apenas darnos cuenta, de manera que tener siempre una ensalada en el centro de la mesa es una buena idea en las comidas de Navidad», afirma la nutricionista Pilar Esquer.
Otro acierto pueden ser los volovanes rellenos de langostinos y crema.
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