El artista vive todas sus experiencias al máximo y ha sabido beber de la cultura y el arte de Estados Unidos al mismo tiempo que viajaba por el país. No obstante, la guinda del pastel de este viaje la ha puesto su chica Rachel Valdés. La joven tiene desde hace varios años una obra en la Avenida del Puerto de la ciudad de La Habana que tiene conquistado al artista. Tanto es así que ha presumido de ella frente a sus seguidores.
Como creador de arte, Alejandro Sanz también es consumidor de este, el cual nos hace entendernos un poco más como seres humanos. El cantante confesaba que la obra de su chica le produce «una gran emoción» porque está llena de «poesía y de vulnerabilidad«.
No es la primera vez que este presume de su pareja a través del talento de esta. «Amo tu arte como parte de amarte a ti«, confesaba en una ocasión como toda una declaración de amor. En esta ocasión la declaración llegó de la siguiente manera: «Gracias por dejarme entrar en tu cubo azul«. Algo que se puede traducir como un agradecimiento por haberle dejado entrar en su vida o por dejarle ver la vida a través de sus ojos.
La propia Rachel Valdés también compartía estos días su obra desde distintas perspectivas, y Alejandro Sanz no pudo evitar aplaudirle de nuevo en una de las publicaciones: «El talento de la mujer que amo«.
El apoyo es parte del amor y en el caso de la pareja este es recíproco. Ella está también muy presente en cada uno de los logros del artista, celebrando junto a él. «Uno de esos momentos que brillan y se quedan por siempre. Felicidades amor, no puedo estar más orgullosa de ti«, expresaba en sus redes la joven cuando este consiguió la estrella en el Paseo de la Fama.
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