Son muchos los factores que intervienen en la limpieza de nuestra casa, saber limpiar correctamente cada zona pero también saber usar cada producto adecuadamente sacándole el mayor partido, puede hacer que ahorres tiempo y dinero. Ahorra en productos de limpieza evitando estos errores.
Y es que hay algunos errores que solemos cometer en este sentido, por ejemplo añadir más agua de la necesaria, cuanto más agua añadamos más fuerza perderán los componentes que ablandan la suciedad. Por eso, si vas a usar agua, que sea fría y no en mucha cantidad. Si la añades caliente puedes generar vapores tóxicos peligrosos.
Otra cosa que debes evitar es mezclar limpiadores, por ejemplo, mezclar un producto que desinfecte con otro que desengrase puede generar también vapores tóxicos. Debemos evitar sobre todo productos amoniacados y ácidos. Ni siquiera debemos mezclar productos de marcas distintas ya que suelen usar componentes diferentes.
Hay mezclas que no debes hacer nunca por ejemplo la de amoniaco y lejía. Esta mezcla produce gases tóxicos que pueden llegar a provocar incluso desmayos. Tampoco es muy aconsejable mezclar bicarbonato y vinagre ya que la mezcla neutraliza el efecto limpiador que ambos ingredientes tienen por separado
En vez de potenciarlos, la mezcla neutraliza el efecto limpiador que tienen los dos por separado. Sobre todo no hagas la mezcla nunca dentro de un bote cerrado porque podría llegar a explotar.
Algo que también debes evitar hacer es echar el producto antes que el agua, ya que se genera una gran cantidad de espuma que dificulta llegar al agua e incluso poder llenar bien el cubo, debido a que se desborda. Al igual que utilizar un mismo producto para todo, no existe un producto mágico para todo. Lo aconsejable es tener un producto multiusos, lejía para el baño y la cocina, un limpiador de horno y otro de vitro, amoniaco para azulejos y lavavajillas.
A la hora de utilizar cada uno de ellos se cuidadosa, por ejemplo el producto desengrasante suele ser muy fuerte y por eso solo debes usarlo para zonas con mucha grasa, rociando sobre las manchas y dejándolo que actúe unos 10 o 15 min.
El amoniaco va muy bien para limpiar azulejos, ventanas, cocinas. Dos o tres tapones por cubo de agua será suficiente. La lejía es perfecta para desinfectar y limpiar gres, terrazo y sanitarios. Úsala siempre diluida en agua (1 tapón por cada 5 l). En cuanto al limpiacristales déjalo actuar quince segundos y pasa el paño sin frotar.
Otro error muy frecuente es echar más cantidad de la necesaria, no por eso va ha conseguir que el producto limpie mejor, sólo formarás mucha cantidad de espuma que te será muy difícil de retirar.
MÁS SOBRE:
© Sociedad Española de Radio Difusión, S.L.U.
© Sociedad Española de Radiodifusión realiza una reserva expresa de las reproducciones y usos de las obras y otras prestaciones accesibles desde este sitio web a medios de lectura mecánica u otros medios que resulten adecuados a tal fin de conformidad con el artículo 67.3 del Real Decreto-ley 24/2021, de 2 de noviembre.