El verano está a la vuelta de la esquina y con él las vacaciones, los ratos de playa o piscina y, sobre todo, las ganas de ponernos morenos y lucir un envidiable tono dorado en nuestra piel cuando nos vestimos con pantalones cortos, faldas o camisetas de tirantes. Tan solo hace falta echar un vistazo a cómo han ganado popularidad durante los últimos tiempos productos como los aceleradores del bronceado para comprobar lo importante que resulta para muchas personas conseguir un tono más moreno con la llegada del buen tiempo.
Además de por cuestiones estéticas, tomar el sol tiene ciertos beneficios para nuestra salud, por ejemplo, los rayos potencian la síntesis de la Vitamina D, ayudan al metabolismo óseo, por no hablar de que con un mayor número de horas de luz nos sentimos más optimistas. Aún así y en su cara B, por mucho que nos guste presumir de bronceado no todo son ventajas y debemos tener en cuenta algunas precauciones para protegernos ante quemaduras, sequedad o cualquiera de los daños que el sol puede causar a nuestra salud, donde el más grave sería el famoso melanoma.
Consejos para conseguir un bronceado bonito
Si lo que quieres en conseguir un bronceado perfecto existen cinco reglas básicas que te ayudarán mucho más a lograr tu objetivo que simplemente tumbarte a esperar a que el sol cumpla su misión.
1. Prepara la piel
Después de todo el invierno es muy importante que pongas tu piel a punto antes de exponerla al sol. ¿Cuál es la mejor forma de hacerlo? Mediante una exfoliación semanal de rostro y cuerpo durante la época previa, por ejemplo, a tus vacaciones. De esta forma conseguirás un tono uniforme y te pondrás moreno más rápido, además de otros beneficios de la exfoliación como la eliminación de las células muertas. Puedes ayudarte con algún gel específico, como los que contienen sales, así como por un guante de crin.
2. Hidrátate
La hidratación es el gran secreto para una piel bonita y debes hacerlo tanto por fuera, con lociones hidratantes, como por dentro, bebiendo dos litros de agua al día. Recuerda, después de haber estado tomando el sol lo más recomendable será que apliques sobre tu piel alguna loción hidratante tipo aftersun o que contenga aloe vera. Verás tu piel más bonita y, además, ¡el bronceado durará más tiempo!
3. Usa siempre protección solar
Aunque se trata de un consejo básico y que ya todo el mundo debería tener en cuenta, no está de más repetirlo. Es muy importante proteger nuestra piel frente a la radiación solar, utilizar un factor de protección adecuado (no se recomienda nunca inferior a 15 spf) y repetirnos la aplicación del protector solar cada cierto tiempo, sobre todo, si hemos estado bañándonos y haciendo algún tipo de deporte que nos ha hecho sudar. Recuerda que la protección solar no se debe utilizar únicamente cuando vamos a la playa o a la piscina, sino para cualquier actividad al aire libre y hay que hacer especial hincapié en zonas con lunares, manchas o con tatuajes.
4. Cuida tu alimentación
Si crees que lo que comes no tiene nada que ver con tu bronceado, ¡te equivocas! Además de los efectos sobradamente conocidos de la zanahoria como potenciador del bronceado existen otros muchos alimentos que pueden ayudarte a conseguir un tono de moreno ideal. Mango, albaricoques, calabaza, nísperos, canónigos, espinacas o acelgas son algunos de tus mejores aliados en el plato para un bronceado radiante.
5. No te expongas al sol durante períodos muy largos
Pasarte todo el día tumbado al sol no es lo ideal por mucho que desees conseguir un bronceado perfecto. Los expertos y dermatólogos recomiendan que las exposiciones al sol no duren más de 30 minutos y nunca llevarlas a cabo en las horas centrales del día.
¿Qué son los aceleradores del bronceado?
Existen otros métodos para ponerse moreno sin tener que permanecer exponiéndonos al sol como los cada vez más exitosos autobronceadores o los aceleradores del bronceado. Se trata de lociones que consiguen que nuestra piel luzca un color dorado y bonito en un tiempo mucho menor gracias a que estimulan la producción de melanina de nuestro cuerpo. A diferencia de los autobronceadores, que algunos tienden a dejar un tono anaranjado, por norma general proporcionan un bronceado mucho más natural. Además de en formato loción, spray o crema, también existen en el mercado ciertos complementos vitamínicos específicos para esta función.
Aceites bronceadores, ¿cómo usarlos?
Al contrario de lo que muchas personas piensan la aplicación de crema solar no impide que nuestra piel se broncee, pero aún sí, si lo que buscas es subir tu tono en un tiempo récord siempre puedes optar por un aceite bronceador. Existen muchos que cuentan con altos factores de protección como los de NIVEA, Piz Buin, o Ecran, aunque el más vendido de Amazon es el aceite bronceador de la marca Australian Gold, que tendrás que usar combinándolo con alguna crema solar puesto que no tiene ningún tipo de filtro de protección.
Los 7 aceites bronceadores mejor valorados del mercado:
Hawaiian Tropic Tanning Oil. Sin protección solar. Precio en torno a 7 euros por envase de 200 mililitros.
Garnier Delial aceite bronceador. Con aroma a coco y sin protección solar. Su precio se encuentra a partir de los 7 euros por envase de 200 mililitros.
Australian Gold Dark Tanning Accelerator. Es el más vendido de muchas plataformas como Amazon y ha ganado una enorme popularidad en los último años. Su precio se encuentra alrededor de los 13 euros por el envase de 100 mililitros.
Babaria Tanning oil gel. Lo novedoso es que se trata de un aceite solar pero en textura gel, por lo que parece que cunde más. No tiene protección solar y su precio ronca los 10 euros por el envase de 100 mililitros.
Piz Buin Tan & Protect. El primero de la lista que acelera el bronceado bonito mientras protege la piel necesita, ya que tiene un factor 15 spf, por lo que no es necesario combinarlo con otros productos. Su precio se encuentra en torno a los 8 euros por e envase de 150 mililitros.
Ecran Sunnique Broncea+. La mítica marca de aftersun ha conseguido que su aceite bronceador esté entre los más buscados precisamente porque cuenta con un factor 30 spf de protección. Su precio se encuentra en torno a 10 euros por el envase de 100 mililitros.
