Usar aparatos de ventilación, abrir puertas y ventanas y ropa de abrigo cómoda: instrucciones del Gobierno para frenar contagios en los colegios

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El riesgo de contagio en lugares cerrados es una realidad. Ahora que llegan las bajas temperaturas, volvemos a meternos en los interiores. Los colegios, donde nuestros hijos pasan más de cinco horas de jornada escolar supone un auténtico quebradero de cabeza.

El Gobierno ha presentado una guía preparada los colegios por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en en la que da varias recomendaciones, entre ellas, ventilar a toda costa, aunque provoque incomodidades térmicas.

Y es que la renovación de aire es esencial porque gracias a ella sustituimos el aire interior, potencialmente contaminado, por aire exterior libre de virus.

De hecho, el protocolo Covid-19 enviado por Educación ya recomendaba ventilar al menos durante 10 o 15 minutos al inicio y al final de la jornada y “todo el tiempo posible”.

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Si las ventanas se cierran, el riesgo de contagio en un aula se dispara

Hace unos días, www.cadenadial.com publicaba las conclusiones de un docente que tras realizar el experimento advertía: «Cuando tengamos que cerrar las ventanas (por el frío), vamos a tener un problema y muy grande”

Nius.es se hizo eco del experimento realizado por este profesor con el que se pretendía evidenciar el riesgo de contagio por aerosoles cuando se cierren, a la llegada del invierno, las ventanas de las clases en los colegios.

Una vez comprobado que el contagio por aerosoles es una de las principales vías de propagación del virus, la ventilación de los espacios cerrados se ha convertido en una de las medidas claves que debemos adoptar para evitar la transmisión.