Todos estos remedios van enfocados al sudor de las axilas y también todos ellos funcionan una vez se aplican sobre los poros de la piel. El primero de ellos consiste en talco o féculas de maiz, ambos con propiedades absorbentes muy eficaces.
Mucha atención a la mezcla del vinagre y el limón, ya que te ayuda a reducir la población bacteriana de la zona; o la leche de magnesia, producto que también se utiliza contra la acidez estomacal. Este último remedio te ayudará incluso a olvidarte del mal olor.