Se salva de morir ahogado tras rezar y ser salvado por unos sacerdotes subidos a un tiki bar

Rodrigo Díaz

La historia que nos acerca Saray Esteso es de esas que no puedes dejar de escuchar porque, cada cosa nueva que sucede supera a lo anterior. ¡Escucha!

 

 

 

Jimmy McDonald sufrió un accidente con su kayak y acabó volcando. En mitad del lago y ante las corrientes, con su salvavidas mal puesto porque le apretaba el cuello, poco podía hacer más que esperar la ayuda de alguien que no llegaba. Y decidió rezar a Dios como última alternativa.

¡Y parece que funcionó! A lo lejos comenzó a ver un barco bar donde se encontraban varios sacerdotes paulistas. Lo más curioso es que el protagonista de esta historia llevaba por aquel entonces siete años sin beber una sola gota de alcohol.

«Fuimos invitados a este recorrido gratis; no bebimos (demasiado)», aclara en clave de humor uno de los sacerdotes en Twitter. Queda claro que el posible escepticismo de Jimmy McDonalds se ha diluido tras ver su vida literalmente en peligro.