El artista onubense ha sido uno más de los que han visto afectados sus proyectos por la crisis del coronavirus, pues la segunda tanda de conciertos de la gira se encuentra suspendida hasta nuevo aviso.
Este, como sus seguidores, no ve el momento de volver a pisar los escenarios y sentir la emoción de estar frente a su público. Y de alguna manera podemos revivir con él estos momentos mientras llega la normalidad. Manuel Carrasco nos ameniza la espera con un lanzamiento especial, el documental y el concierto de uno de los espectáculos más importantes de su carrera, el llevado a cabo en el Wanda Metropolitano de Madrid el pasado 29 de junio y que ya está disponible en Amazon Prime Video.
A falta de conciertos en físico, ¡buenos son los espectáculos grabados! Este concierto ha supuesto uno de los momentos cumbre de su carrera, una manera de consolidar el gran éxito que el artista lleva arrastrando durante los últimos años.
Este proyecto audiovisual cuenta con dos episodios. El primero, de unos 40 minutos, en el que Manuel Carrasco nos habla de todo lo que fue la preparación de este concierto, las emociones que le rodearon los días previos y la organización del mismo. El segundo, de dos horas y media, es el concierto completo. Un regalo que nos acerca estos días a eso que tanto echamos de menos: disfrutar de la música en vivo.
Un regalo, además, para todos, que permite revivir la experiencia a todas aquellas almas que disfrutaron el concierto en directo en su día, y descubrir cómo fue a todos aquellos seguidores que no pudieron asistir. ¡Todos salimos ganando!
Cuando las musas llaman a la puerta de un artista, entran y ponen la casa patas arriba. Apenas un par de días antes de la gran noche, Manuel Carrasco comenzaba a recopilar los primeros versos de la que sería la canción que abriría el concierto: Mi Madrid.
Un tema dedicado a la ciudad que le vio nacer como artista hace ya 18 años y en la que ha construido su vida personal. Esta canción trastocó los planes iniciales del concierto, pues de un momento a otro tanto Manuel como el equipo consideraron que era buena idea abrir la noche con el artista en el centro interpretándola a piano.
Nada estaba previsto. Nadie estaba avisado. Era una de las noches más especiales en la trayectoria de Manuel Carrasco y apenas 24 horas antes él mismo arriesgaba cambiando algunos planes. Apenas había ensayado la canción, ni siquiera estaba grabada. El resultado, no obstante, es una prueba más que secunda el refrán «el que no arriesga no gana».