Pone a su hija el nombre de su amante… ¡Y se lo confiesa 18 años después!
Nos lo cuenta Arancha, cuyo nombre provenía de la amante de su padre. Gustaba a ambos, pero no fue hasta 18 años después cuando se lo contó a su madre y a ella misma.
Otro padre «original» fue también el de Yolanda, que modificó los nombres de las cinco hijas que tenía. De hecho, esta atrevida iba a llamarse María José, pero acabó llamándose así por la canción. Normal que su madre se negara a tener más hijos…
La batalla perdida contra los diminutivos
Por su parte, Natalia no acabó siendo Clara por una sencilla cuestión: su madre quería evitar a toda costa los diminutivos. De poco le sirvió ya que ahora le llaman Nati, Natalita…
También contamos con atrevidos despistados que, en el momento, se olvidan del nombre que iban a elegir y se quedaron con el de la persona del registro, tal y como nos relata Sonia.
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