Podrían ser 35 jóvenes presentándose a las escuelas de acceso a profesores en México, o a los mismísimos fans de las uñas de Rosalía. Lo que está claro es que tuvieron una original manera de copiar en los exámenes.
Dejándoselas crecer durante meses, todos estos estudiantes se presentaron al examen con los temarios apuntados en las uñas de sus manos. Un plan genial para lograr el aprobado, de no ser porque esas uñas cantaban demasiado.
Lo más llamativo es que no fueron suspendidos de inmediato, sino que les dieron otra oportunidad mandándoles a otra sala y realizando la prueba con guantes en las manos.
Loading ...
Sobre esto, algunos atrevidos se han animado a compartir algunas «técnicas» que llevaron a cabo durante su etapa de estudiante. Ese es el caso de Manuel y el «examen de morse» en el que la chica más lista de la clase iba dando las respuestas con golpes en la mesa. Y tú, ¿qué otro método utilizaste?