De esa manera, existe el padre o madre «autoritario/a» que siempre funciona con el «porque lo digo yo«. Será de los censuradores con las nuevas tecnologías. Una actitud que acabará siendo contraproducente, porque el hijo o la hija desobedecerá y solo le provocará rabia.
Otro tipo totalmente opuesto es el de los padres sobreprotectores, que en este contexto se convertirán en padres helicópteros. Seguirán a sus hijos en redes y les comentarán en cada publicación, generándole una cierta vergüenza o sensación de incomodidad.
Como tercer modelo encontramos a los «pasotas«, cuya actitud no beneficiará lo más mínimo a los pequeños. Lo interpretarán de una manera equivocada, convirtiéndose en autodidactas y arriesgándose a sufrir todo tipo de problemas con las tecnologías.