Pablo Alborán, como un niño pequeño en la mañana de Reyes
Con las piernas cruzadas y sentado en el suelo, el malagueño desempaqueta el contenido de los diferentes packs de este nuevo lanzamiento con una sonrisa que carga con el peso de toda esa ilusión que ha volcado en este proyecto.
Vértigo es el nombre del disco y lo que inevitablemente el artista sigue sintiendo cada vez que se encuentra ante un momento tan importante en su carrera como este. ¡Y menos mal! Porque, centrándonos en sus propias palabras, sentir vértigo es sinónimo de que estamos vivos.
Hay numerosas maneras de hacerse con este nuevo disco del malagueño. Desde la opción de comprar simplemente el clásico CD hasta la de hacerse con una caja de lujo que incluye el vinilo, el CD, un calendario, un libro muy especial en el que Pablo Alborán detalla algunos de los acontecimientos vividos profesionalmente en los últimos años, unas postales con imágenes del artista y hasta ¡una mascarilla personalizada!
Lo bueno se hace esperar
Dicen que lo bueno se hace esperar y este dicho viene muy bien al caso con este lanzamiento. Si bien inicialmente estaba previsto que viera la luz el 6 de noviembre, la situación del coronavirus, una vez más, volvió a truncar los planes de Pablo Alborán.
No debió ser fácil para el artista asumir este cambio repentino a pocos días del que iba a ser el lanzamiento oficial del mismo, pero con el apoyo incondicional de sus seguidores, privilegio del que el artista lleva disfrutando desde sus inicios, seguro que la situación se lleva mejor.