Te vamos a convencer: razones para que te olvides de llevar el móvil en el bolsillo

Redacción Cadena Dial

No nos pondremos demasiado serios aunque sería adecuado que dejases de utilizar el móvil para experimentar los múltiples beneficios que conlleva tan sabia decisión. Sin embargo, nos vamos a centrar en por qué deberías dejar de llevarlo en el bolsillo. Lo sabemos, eres como el Capitán América y si no lo llevas te sientes sin escudo y desconectado del mundo, pero no es así. Es más, hay mucha vida más allá de la pantalla de tu teléfono.

Tu salud está en juego

 

¿Te imaginas que tu abuelo fuera con el modelo góndola de teléfono fijo amarrado con una cuerda a su cinturón? ¿Por qué consideras que tienes que estar conectado con el resto del mundo en todo momento? ¿Porque te aburres? Es posible, pero quizá no tengas en cuenta algo tan evidente como lógico: el móvil recibe y emite radiaciones que no son saludables. Es decir, para que puedas hablar, tu teléfono se va conectando continuamente al repetidor más cercano lo que provoca que tu cuerpo haga de transmisor de diversos tipos de ondas.

Y hasta aquí la clase de electrónica de hoy. Un cafelito y comenzamos con la de medicina general. ¿Estás preparado? Bien. Llevar el móvil en el bolsillo, delantero o trasero, provoca que esa radiación continua termine afectando a la zona que lo rodea. La clásica fundita, de principios de siglo, que se introducía por el cinturón terminó provocando un debilitamiento de los huesos pélvicos y de la cadera en cientos de pacientes.

Resulta curioso cómo, dependiendo del sexo, se emplean distintos bolsillos para tener a buen recaudo el teléfono. Si eres hombre, lo llevarás en el bolsillo delantero y si eres mujer en el trasero. Esta decisión puede provocarte serios problemas de salud.

El móvil y el género de su usuario

 

En el caso de las mujeres, se ha observado el crecimiento de tumores y de células cancerígenas en zonas como los ovarios, la parte baja de la espalda e, incluso, otras zonas vitales como los senos. La radiación no tiene límites y afecta por igual a todo el organismo.

Los hombres que llevan el móvil en alguno de los bolsillos delanteros presentan un nivel de fertilidad inferior a la de otros hombres que no tienen esta costumbre. Los testículos se ven afectados tanto por un aumento de la temperatura como por la antedicha radiación que afecta, directamente, a la calidad del semen.

A ambos géneros hay que aclararles que las personas que hablan durante muchas horas al día por el móvil son susceptibles de sufrir problemas en el funcionamiento de su glándula tiroidea que tiene, entre otras, la función de controlar el metabolismo.

Comprendemos que resulta necesario llevar el teléfono encima por lo que pudiera ocurrir, pero si te es posible es casi mejor llevarlo en un bolso o en una mochila evitando siempre el contacto directo con el cuerpo. Para hablar, son más saludables los auriculares, incluso estando en casa. La idea es evitar que tu cuerpo se vea afectado por el campo electromagnético que permite que tu teléfono te sirva para recibir y emitir llamadas o mensajes.

De todas formas, recuerda que el móvil es una herramienta que te ayuda a comunicarte con tus familiares, con tus amigos o con tus compañeros de trabajo, pero nunca ha de convertirse en el eje sobre el que gira tu vida. Entendiendo este concepto conseguirás no solo proteger tu salud, por los motivos ya explicados, sino también tener una vida más plena y mucho más divertida.