Los servicios médicos están saturados y, ante la falta de material que muchos centros han manifestado, algunas personas están mostrando su faceta más solidaria sacando partido de sus habilidades para echar una mano.
La escasez de mascarillas es un hecho probado. Las autoridades sanitarias llaman a la calma e insisten en la higiene de manos. Aún así tienes que saber que no todas las mascarillas protegen del contagio del Covid-19, más conocido como coronavirus. La protección total, 100%, no existe, pero siempre podemos hacer algo para estar menos expuesto.
Las Mascarillas quirúrgicas son las que estamos acostumbrados a ver en las consultas médicas. Protegen de dentro hacia afuera. Es decir, evitan que la persona que la lleve expulse fluidos o secreciones. También evitan que nos lleguen salpicaduras de sangre, o estornudos, o saliva, por eso se llevan en los quirófanos y se llaman quirúrgicas. Entre no llevar nada y usarlas, algo hacen pero no son lo más efectivo para evitar el contagio.
Las Mascarillas filtrantes FFP1, FFP2 y FFP3. Las FFP2 son las que se recomiendan para evitar el contagio por coronavirus chino.Filtran el 92% de las partículas.
Nuestra compañera Carmen Ramírez ha hecho un tutorial para enseñarte a fabricar tu propia mascarilla quirúrgica. Repetimos, no sirve para evitar el contagio, pero entre salir a comprar con un pañuelo en la boca o una bufanda y esto, es mucho más cómodo.
Carmen ha hecho este protector bucal utilizando toallitas, cuantas más capas le pongas mejor, pero también puede hacerse la mascarilla con bayetas de cocina, cuyo tejido es más grueso.
Te contamos el caso de una mercería situada en la población aragonesa de Miralbueno. Gloria, su propietaria, cerró el negocio el pasado sábado después de que el Gobierno decretara el estado de alarma, tal y como ha confesado en Heraldo.
No obstante, al darse cuenta de que los sanitarios manifestaban la falta de material esencial como son las mascarillas, decidió volver a abrir. Pero no para vender, sino para fabricarlas y donarlas a estos profesionales que las reclaman. A ella se han unido varias alumnas de su taller y, con las telas de las que esta dispone en el local, están fabricando mascarillas de algodón para entregárselas a aquellos que las necesitan.
Te explicamos paso a paso cómo fabricar tu propia mascarilla de tela. Recuerda que las mascarillas solo son necesarias para aquellos pacientes que están infectados o, en el caso de los profesionales sanitarios que tratan a diario con ellos, para no contagiarse.
¡Vamos allá!
1. Necesitaremos una tela 20×35 centímetros, dos tiras de otra tela de 4,5×15 y dos gomas de medio centímetro de ancho y 16 cm de largo cada uno. Además, para llevar a cabo el trabajo necesitaremos alfileres, tijeras, una aguja e hilo de coser. Si tenemos máquina de coser, el proceso será más rápido.
2. Doblamos la tela grande dejando el lado opuesto a la vista, para coser los laterales. Una vez cosido, nos quedará una especie de saco al cual daremos la vuelta. De esta manera, las costuras quedan invisibles en su interior, y nuestra mascarilla tendrá el dibujo a ambos lados.
3. A continuación, realizamos tres pliegues, los cuales ayudarán a que la mascarilla quede algo holgada en la figura de nuestra mandíbula. Comenzamos realizando el pliegue central y posteriormente haremos uno arriba y otro abajo del mismo tamaño y siempre en el mismo sentido. Sujetamos con alfileres y cosemos para fijar el resultado.
4. El siguiente paso es colocar las gomas. Podemos volver a pasar la máquina de coser para fijarlas, o bien dar un pequeño pespunte, pues a continuación terminaremos de asegurarlas y las ocultaremos con las tiras de tela laterales.
5. Doblamos las tiras de tela por la mitad y las planchamos para que nos queden bien uniformes.
6. Colocamos estas en la parte externa de la mascarillas (la misma parte en la que hemos fijado las gomas), con los salientes doblados hacia el exterior y sujetados con alfileres.
Pasamos la máquina de coser en el borde para unir la tira a la máscara. Solo lo haremos a este lado, pues después voltearemos la tira y fijaremos el lado que nos queda suelto por la otra parte. De este modo, la tira azul queda en la parte interna de la mascarilla.
¡Ya tenemos nuestra mascarilla lista! Es el momento de colocársela para probar su funcionamiento. Si quieres, y si no lo has hecho con las telas antes, puedes lavarla en la lavadora antes de utilizarla.
No debemos olvidar que se trata de un complemento destinado a proteger nuestra salud y a día de hoy se ha convertido en un producto muy demandado. Prepara tu propia mascarilla en lugar de comprarla, para que así aquellos que realmente necesiten acudir a la farmacia a por una, tengan la posibilidad de adquirirla.
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